miércoles, 24 de julio de 2013

FISIOLOGIA

Universidad Alfonso Reyes.


Fisiología del ser humano I

Nombre: Stephanie Martinez Silva.
Matricula: 3288
Fecha: 18/07/2013
Maestro(a): Alethia Rangel.



Introducción:
Cómo debemos enseñar la sexualidad a nuestros hijos adolescentes En este ensayo estaremos mostrando interesantes estadísticas y hablando de la problemática sexual, así como de algunos mitos que  existen en torno a la educación sexual. La Educación Sexual es un tema que preocupa a padres y educadores. La familia es el lugar privilegiado para enseñar y formar a los niños y adolescentes en la comprensión del don de la sexualidad y del correcto ejercicio de ella. Hablar de sexualidad es positivo y enriquecedor, nunca debe ser tratado como algo sucio u obsceno. Ha de haber respeto, seriedad e, incluso, admiración ante el hermoso hecho de que somos hombres y mujeres y podemos dar vida a otro ser humano.
Es muy importante que  los padres de familia escuchen y aprendan muchas veces, hablar sobre sexualidad es un tabú en la familia y los adolescentes aprenden más con los amigos que con los padres. Y cuando se enseña, en la mayoría de las ocasiones, se enseña mal y los adolescentes no reciben una idea clara de lo que es el sexo ni del valor que tiene la sexualidad.















La Educación Sexual es un tema que preocupa a padres y educadores. La familia es el lugar privilegiado para enseñar y formar a los niños y adolescentes en la comprensión del don de la sexualidad y del correcto ejercicio de ella. Hablar de sexualidad es positivo y enriquecedor, nunca debe ser tratado como algo sucio u obsceno. Ha de haber respeto, seriedad e, incluso, admiración ante el hermoso hecho de que somos hombres y mujeres y podemos dar vida a otro ser humano.
Primera Infancia (aproximadamente hasta los 7 años): Durante la infancia los niños “descubren” la existencia de los sexos: saben que hay niños y niñas y que son diferentes. En esta edad es muy importante que los padres digan a sus hijos lo felices que se sintieron cuando supieron que era “él o ella” en el momento de nacer o en una ecografía. El niño está desarrollando las bases de su seguridad personal y de su propia personalidad y necesita mucho el saberse querido y aceptado como es, por aquellos que más ama: sus padres.
Otro elemento muy importante en esta edad es el desarrollo de una relación de confianza con los padres. El niño debe sentirse siempre seguro de que sus palabras son escuchadas, creídas y aceptadas; obviamente esto implica estar atentos a las pequeñas mentiras o fantasías normales y ayudarle al niño a reconocer entre la realidad y sus sueños y a asimilar que es mejor siempre decir la verdad aunque duela. Esto facilitará que más adelante sea a sus padres a los que consulte sus dudas respecto a su sexualidad, y disminuirá el riesgo de ser objeto de abuso. Un niño bien atendido, que confía en sus padres y está advertido de los extraños, es una presa difícil para quienes abusan de menores.
Objetivos en la educación sexual a esta edad: que el niño desarrolle una sana afectividad por quienes les rodean y hacia sí, que el niño vaya conociendo progresivamente las diferencias sexuales entre hombres y mujeres, que viva con naturalidad su realidad corporal y sus funciones, que vaya adquiriendo un vocabulario adecuado para estas realidades, que comprenda la importancia del amor en las relaciones familiares, que reconozca el papel de la familia en su vida y su papel en su familia, que comprenda que los niños tienen padre y madre, que se desarrollan en el vientre de su madre (generalmente basta hablar de una semilla inicial), que sepa los conceptos básicos del nacimiento de los niños y la necesidad de mayor atención y cuidados que tienen los bebés, que comprenda y viva que el crecimiento no sólo es aumento de tamaño sino que implica responsabilidades
Medios que pueden utilizar padres y formadores: tener manifestaciones de cariño hacia los niños, éstas dependerán de las costumbres de la familia, del carácter de los niños, etc; pero nunca pensar que porque han dejado de ser “bebés” ya no necesitan besos, caricias, abrazos, palmaditas en el hombro, etc. demostrar siempre cariño y atención a sus preguntas y comentarios, que los niños vean que tiene atención, pero sin permitirles abusar ser claros y veraces ante las preguntas de los niños, adecuando la cantidad de información a la capacidad de comprensión del niño aprovechar las oportunidades que presentan los hechos de la vida normal: la llegada de un nuevo hermano o primo generará curiosidad y la posibilidad de entablar muy buenas conversaciones estar atentos a la información que los niños están recibiendo por televisión u otros medios. Saber mostrar lo que es natural y que hay personas que realizan conductas diferentes no adecuadas desde los 3 años los niños comienzan a entender la importancia de la intimidad y el pudor. Fomentarlo con el testimonio y las palabras si sorprenden a los niños en juegos o comportamientos inadecuados, distraerlos y buscar que se interesen en otros. Si insisten o preguntan por qué no pueden jugar a eso, decir que no está bien y no tocar nuevamente el punto
Segunda Infancia (7 a 9 años): Esta es una edad relativamente tranquila en la que el niño madura intelectual y moralmente. Acostumbra a ser llamada la edad de la obediencia porque los niños suelen ser dóciles a las indicaciones de los mayores. En esta edad la sexualidad se expresa en un vivo sentido del pudor, los niños ya no desean que sus madres les ayuden a bañarse ni que los acompañen al baño. Es tal vez señal del inicio del sentido de expresión de la propia dignidad. Inicialmente niños y niñas se mezclan fácilmente, pero poco a poco comienzan una progresiva separación de sexos, dejando de jugar juntos. Demuestran interés por el papel y características sexuales de ambos sexos. Hay mayor curiosidad por el embarazo y el papel del padre en la procreación. Ya a los nueve, comienzan a buscar material informativo: dibujos, explicaciones, preguntan a los amigos y si alguno del grupo adquiere información con facilidad la dará a sus compañeros, aunque no sea de la mejor forma posible. Es una época serena, pero la curiosidad sexual sigue existiendo y actualmente hay muchas formas en que un niño puede acceder a información sin necesidad de consultar a sus padres. No hay que temer adelantarse, se puede ir tanteando terreno con comentarios y preguntas en momentos de conversación tranquila y sin interrupciones para ver qué tanto saben, qué intereses o curiosidades tienen.
En general el niño o la niña harán preguntas, si no las hacen es mejor adelantarse y plantear el tema. Su interés es intelectual, curiosidad sana por comprender algo que pertenece a la vida cotidiana. Siempre es mejor que reciba la información de sus padres, antes que de un amigo o de una revista o película, es mejor adelantarse un poco que llegar tarde.
Cuando se entable la conversación, hay que evitar que sea un simple informar y en realidad sea una formación en el amor. No es necesario decirlo todo de una vez, se pueden dar algunas informaciones básicas dejando la puerta abierta para próximas “charlas”. Terminar, por ejemplo, con un “cuando tengas otra duda me dices y continuamos”, “hay otros elementos del mismo tema, pero creo que por hoy es suficiente, así tenemos tema de conversación para la próxima”. Y no tener miedo de decir al niño que es mejor que todo esto lo sepa por sus padres o formadores que por amigos o extraños, porque ellos no siempre tendrán toda la información y pueden equivocarse.
Es muy importante en esta edad continuar formando integralmente a los niños, en los valores morales, en el ejercicio de la voluntad, en la docilidad a la propia conciencia. A esta edad comienzan a ser capaces de entender porqué ciertas acciones no se hacen, porqué sus padres les prohíben algunas compañías o ir a ciertos lugares; pero para entender necesitan saber, los padres deben dialogar con sus hijos, llevarlos a interiorizar e ir haciendo suyos normas y principios de conducta. Algunos elementos prácticos que pueden ayudar: acostumbrarlos a hacer pequeños sacrificios, fomentar los momentos de conversación en privado con cada hijo: al salir de compras, al ir a recoger al hermano, saber qué material reciben nuestros hijos: por TV, revistas, Internet, los amigos, etc.  Los objetivos más específicos de la educación sexual a esta edad están en una situación intermedia entre los de la primera infancia y de la pre pubertad. En este sentido dependerá mucho de la madurez de cada niño, de la situación de la familia, de la realidad que lo circunda y por lo tanto, es importante para padres y educadores comprender que cada niño es diferente y que debe adaptarse y adecuarse a sus necesidades. Esto es exigente, pero es señal de verdadero amor y cariño.
Medios que pueden utilizar padres y formadores: continuar demostrando el cariño y la confianza en ellos, pueden “rechazar” las demostraciones de cariño porque “ya soy grande”, pero es una pantalla y necesitan seguir sintiendo que son importantes para sus padres, mantener el clima de confianza, que los niños sepan que sus padres les escuchan sin burlas ni prisas, que responden siempre con la verdad, que no rompen sus confidencias innecesariamente, fomentar conversaciones “en privado”, interesarse por los gustos, las preocupaciones y los intereses de los niños
  • aprovechar los momentos en que se está a solas con los niños, al recogerlos en el colegio, al terminar las tareas escolares, cuando papá ha tenido una comida de negocios, etc. Si no se dan espontáneamente, entonces es bueno producirlos: invitarlos a comer fuera “solos mamá o papá y tú, para que podamos conversar de tus cosas”
  • conocer las amistades y las actividades que los niños realizan, involucrarse en ellas y estar presentes
  • estar atentos a cambios de comportamiento, aunque difícilmente implicará algo muy grave, sí puede ser manifestación de una preocupación y una ocasión muy buena para entablar una conversación
  • a esta edad los niños son capaces de razonar y comprender los por qué de normas e indicaciones. Comenzar a darles las razones de las cosas, explicarles y no cansarse de repetirles que buscan su propio bien y que en ocasiones implica decir no o marcar límites
Pre-adolescencia (aproximadamente desde los 9 a los 11 años): En esta edad los niños gustan de la camaradería con otros de su mismo sexo y tienen una enorme energía y capacidad de actividad, que resulta agotador para los adultos. Existe además, un antagonismo entre los sexos que alcanza su punto máximo alrededor de los diez años. Los niños “desprecian” y se ríen de las niñas y ellas los consideran “salvajes” e “incivilizados”. En general a esta edad se mantienen separados por propia iniciativa y les desagradarán las actividades en que los junten, especialmente a los niños, que poseen ya mucha más fuerza física y tienden a realizar juegos más bruscos y que se sienten oprimidos cuando se les pide más suavidad porque “hay niñas también”. Algunos niños y principalmente algunas niñas, pueden llegar a la pubertad a los 11 años o antes. Es bueno que ya sepan lo que esto significa aunque sin sobredimensionarlo. En esta edad los niños ya tienen conciencia clara de lo que está mal, aunque a veces creen que son faltas graves cosas que ni remotamente lo son. Los padres y educadores deben continuar trabajando en la formación de la conciencia y voluntad de los niños, en la generosidad y preocupación por los demás. Además es una excelente edad para interesar a los niños en deportes y actividades que los lleven a utilizar la enorme energía que tienen, siendo además un medio muy bueno para colaborar en la formación de la voluntad y de la capacidad de sacrificio: si deseas ser bueno en los deportes debes entrenar y sacrificarte.
En esta edad suelen presentarse períodos de ambivalencia. Los niños pasan de la mayor obediencia y docilidad a la rebelión absoluta. Está comenzando a autoafirmarse y formar su propio carácter. La conciencia empieza a construir un sistema de valores más personal. Es muy importante la compañía, la proximidad y el testimonio de los adultos alrededor de los niños. Si no hay coherencia o las palabras no se corresponden con las experiencias, el niño estará confuso y no sabrá cómo reaccionar, o simplemente creerá que todos son así y, por lo tanto, es posible decir una cosa y hacer otra; hacer una cosa un día y al siguiente distinto según me convenga o me “dé la gana”.
Los padres tiene la difícil tarea de encontrar el justo equilibrio entre libertad y autoridad, evitando los excesos de abandono, dejadez, afecto y sobreprotección y autoridad. Los niños a esta edad necesitan que se les marquen límites y se les den pautas, pero también que se les permita responsabilizarse y hacer elecciones. Hay que ir poco a poco. Se puede comenzar permitiéndole escoger qué ropa desea ponerse, las primeras veces puede ser recomendable ofrecerle opciones: el pantalón azul o el marrón; luego, cuando se sienta más seguro y tenga algunos parámetros de estética podemos dejarlo escoger libremente. O tal vez sea el postre, el juego o el lugar de paseo.
Y por otro lado ya es posible darle responsabilidades. Ya desde pequeños (cuatro o cinco años) los niños desean “contentar” a sus mamás con pequeños servicios, que tal vez no hagan tan bien como ellas, pero es bueno dejarlos porque así aprenden a compartir el trabajo. Al alcanzar esta edad ya pueden responsabilizarse por alguna función en casa: alimentar al perro, sacarlo a pasear, sacar la basura, secar los platos, poner la mesa el domingo, etc. Siempre adecuado a su capacidad y habilidad.
No quedan dudas que esta es la etapa en la que más abiertamente hay que comenzar a tratar con ellos los temas relacionados con la sexualidad, la procreación, etc. El momento exacto y más adecuado deben distinguirlo los padres, pues de ellos es la responsabilidad, ya que son los que mejor pueden explicarlo a su hijo. La escuela puede colaborar, pero respetando el papel principal que la familia debe realizar.
Ya desde los 10 años (incluso antes) las niñas comienzan a preocuparse con el tema de “ser mujer”, las relaciones con los varones, llegar a ser madres, la virginidad. Es muy importante que la mamá se haya convertido en su amiga y confidente, que sea ella la que le dé las informaciones, las respuestas y la ayude a formar el corazón y los sentimientos para madurar correctamente. Lamentablemente hoy, pocas mamás se consideran preparadas y creen que deben dejarlo todo en manos del colegio.
A esta edad las niñas pueden comprender perfectamente todo lo relacionado con su sexualidad y sienten curiosidad porque están experimentando los cambios en su cuerpo. Tendrán compañeras o amigas o primas que ya han llegado a la pubertad, algunas que tienen novio o verán las parejas en el colegio y en los lugares de entretención. Hay que hablar con ellas, explicarles todo con un lenguaje a su alcance pero correcto, no creer que “eso ni se le ocurre”y menos aún “ya lo sabe todo”. Nunca será bastante lo que se haga para educar en el verdadero amor, en el valor de la castidad y virginidad como señal de respeto a sí misma y de amor hacia aquella persona con la que se unirá en matrimonio.
A las madres y educadoras o formadoras, puede servirles para iniciar el tema, dar una charla a un grupo pequeño sobre los cambios físicos y fisiológicos que se viven en esta etapa y dejar la puerta abierta a responder dudas personales cuando lo necesiten. Siempre hay que superar lo puramente fisiológico o biológico; en toda respuesta, en toda conversación hay que llevar hacia la formación del corazón, de sus afectos y de la valoración y respeto de su cuerpo y corazón.
Algunas consideraciones: los niños deben ir conociendo su sexualidad poco a poco hasta su pleno descubrimiento en la adolescencia la familia es el principal educador de los niños en la sexualidad, y en ella, los padres. la educación sexual debe insertarse en orden a una completa formación moral de los niños y jóvenes, buscando formar una actitud sana hacia la sexualidad humana, basada en el respeto a la dignidad de la persona, en la virtud de la castidad y en la práctica de la auto disciplinados en la familia, la educación sexual no necesita programarse debe hablarse de ella en el momento adecuado, siendo la enseñanza ocasional en muchas ocasiones la más eficaz la base de la educación sexual exitosa en la familia es la relación de confianza entre padres e hijos. Si los niños y adolescentes se sienten libres para presentar sus dudas a los adultos y saben que recibirán atención y una respuesta verdadera, siempre acudirán y buscarán en ellos la información necesaria una estructura familiar sana es uno de los mejores maestros de sexualidad para los niños y los adolescentes los educadores deben colaborar con los padres, intentando involucrarlos en los programas que se siguen en la escuela maestros y padres enseñan más por el testimonio y ejemplo que por las palabras
Medios que pueden utilizar padres y formadores:
  • en las conversaciones utilizar términos correctos, sin convertirla en una disertación científica.
  • unir sexualidad y afectividad: el amor entre un hombre y una mujer es el fundamento y razón de la vivencia de la sexualidad en el matrimonio
  • tratar al final de la etapa, principalmente con las niñas los temas de la virginidad, la homosexualidad, las relaciones pre-matrimoniales; sin detalle, sino desde el punto de vista de la vivencia del verdadero amor (hay personas que no han aprendido, porque no se les explicó, que la vivencia de la sexualidad verdadera, necesita esperar a la persona con la que unirá su vida para formar una familia, que es verdadero amor el que sabe esperar y respetar al otro y el que no busca satisfacer el propio egoísmo sino darse a los demás, etc. Ideas como estas van calando en la mente y el corazón de los niños y, aunque después se alejen o se dificulte el diálogo, están ahí y saldrán en los momentos adecuados)
  • es importante reforzar el mensaje sobre la necesidad de vivir el pudor y el cuidado del propio cuerpo y la propia intimidad. En general lo que ven en la publicidad y en los lugares públicos se opone a esto, es importante ir ayudando a los niños a crear su propia opinión y decisión, y no dejarse llevar por el ambiente. Por esto es tan importante ayudar a los niños a formar correctamente su conciencia
Conclusión:
La educación sexual podríamos definirla como aquel proceso educativo continuo, vinculado profundamente a la formación integral de niños y jóvenes que les aporta información científica y elementos de esclarecimiento y reflexión para incorporar la sexualidad de forma plena, enriquecedora y saludable en los distintos momentos y situaciones de la vida. Está muy relacionada al desarrollo afectivo y emocional; no hay que caer en el error de enseñar la sexualidad como una práctica profesional de sexo, el sexo no es sólo conocimientos y habilidades, sino que está muy influenciado por los sentimientos. El objetivo de dicha educación es lograr que se posponga la iniciación sexual y que ésta se exprese de forma responsable.







VALORES TEMA ESTRATEGIAS PARA APLICAR LOS VALORES

Universidad Alfonso Reyes.





VALORES.
Nombre: Stephanie Martinez Silva.
Matricula: 3288
Maestro(a): Karina valencia.
Fecha: 22/05/2013














Importancia de la educación de valores.
A pesar de que la familia se considera la primera responsable de la enseñanza de valores y normas en la sociedad, el centro escolar y en especial el grupo clase es uno de los núcleos de integración de valores. Este programa permite servirnos de las leyes de integración de normas existentes en la clase y de los subgrupos presentes en ella para modificar normas indeseables e integrar valores relacionados con el rendimiento académico, de respeto personal, y de socialización relacionados con la necesaria convivencia social.

 Función del profesor y tutor.
La interacción de los alumnos entre si y la relación profesor-alumnos favorece la creación del grupo-clase, hecho especialmente idóneo para la creación de valores y normas de grupo. La integración de valores relacionadas con la formación y la educación es sumamente importante dado que el grupo-clase es uno de los fundamentos del grupo escolar donde se inician, estabilizan y modifican los valores de los alumnos. El profesor o tutor es un elemento activador importante para incidir en la enseñanza-aprendizaje de valores.

La importancia de las estrategias: Las estrategias de aula son ayudas planteadas, recursos, herramientas, procedimientosmétodos didácticos que utiliza el maestro o facilitador en el aula para facilitar, hacer comprender, motivar, estimular y mejorar los procesos de enseñanza-aprendizaje. El énfasis se encuentra en el diseñoprogramación, elaboración y realización, deben ser diseñadas de tal manera que pueda descubrirse el conocimiento por si mismo, se utilizan diferentes lo requiera la edad y la situación. El alumno, con la orientación del maestro, aprende a descubrir con sus habilidades, sus destrezas, su creatividad y hasta con su propia imaginación un aprendizaje realmente significativo.
¿Qué ventajas nos ofrece conocer y potenciar las estrategias en los alumnos?
 Docentes, profesores o facilitadores pueden orientar mejor el aprendizaje de cada alumno si conocemos cómo realmente se aprende. Es decir, que la selección de nuestras estrategias didácticas y estilo de enseñanza será más efectivo.
·         Cómo controlar su propio aprendizaje.
·         Cómo diagnosticar sus puntos fuertes y débiles como alumno.
·         Se de cuenta de lo que hace
·         Emplee sus propias estrategias de aprendizaje
·         Valore sus logros y corrija sus errores.

Estrategias aplicables en aulas para enseñar valores en la infancia, juventud y adultez.
Estrategia 1: Enseñanza a través de  películas que reflejen los valores que se quieren impulsar. Educar en valores a través de proyecciones cinematográficas atractivas para los niños y jóvenes, es un recurso didáctico para enseñarles a los alumnos a observar  comprender y hacer una reflexión critica y creativa de los valores universales que se transmiten por medio de los mensajes  donde a  través de diferentes actividades se transfieren a la realidad  como enseñanza para fomentar  o mejorar valores  y desarrollarse como una persona intelectualmente reflexiva.
Ejemplo:
En la película "Buscando a Nemo" se hace hincapié en la responsabilidad, la cooperación y la solidaridad, a través de la emociones del disfrute, de reír, llorar con la acción de los personajes o identificarse con ellos.
Actividades: Una vez finalizado el film. –Conversación con los alumnos, a modo de reflexión e introducción de los contenidos (los valores) a trabajar.–Seleccionar partes de la película, y descubrir los distintos roles y actitudes de los personajes y que entienden por valores como: la amistad, cooperación, responsabilidad, solidaridad, convivencia; belleza interior o exterior etc.
Estrategia 2 El cuento.
El cuento, como genero literario de mayor aceptación en todas las edades es un extraordinario portador de mensajes formativos ya que es una integración de valores éticos que los ayudaran a encontrar los caminos correctos de la vida, seleccionándolos de manera que respeten y afirmen valores universales, indiscutibles y aceptados en todas la sociedades como la honestidad, la justicia, la dignidad, la solidaridad y familia entre otros.
Ejemplo
El cuento "El Día del Silencio" de Pedro Sacristán posee un valor educativo hermoso : Integrar a las personas con minusvalías en donde debemos dar la oportunidad a quienes tienen algún impedimento a fin de que ellos demuestren todas sus cualidades, evitando que sus problemas nos impidan tratarlos con normalidad, este cuento se ambienta en un pueblo en fiestas cuyos personajes son un niño sordo, su mejor amigo y la gente del pueblo, integra valores como el compañerismo, la amistad, la lealtad, el respeto, y la superación.
Actividad:
Lectura compresiva y sencilla preguntas a los participantes sobre los valores que deben realzar a través del cuento en situaciones similares.
¿Conoces a niños especiales?
¿Que te parece compartir un juego de béisbol o futbol con ellos?
¿Y que tal una competencia en juegos de mesa? Etc.-
Estrategia # 3: Situaciones reales donde estudiantes responderán espontáneamente que harían en los siguientes casos y porque es importante exaltar estos valores.
Ejemplo
HONRADEZ Vicente ha ido al cine y en la taquilla le han dado vuelto de más. Vicente piensa utilizar el dinero para comprarse un refresco y cotufas en el cine, pero sabe que si falta dinero en la boletería al final del día, este le será descontado al señor que lo atendió.

 HONESTIDAD Alejandra ha encontrado de casualidad una de las pruebas de matemática que la profesora va a tomar el día el siguiente. Alejandra necesita sacarse un 16 para aprobar el curso y sabe que nadie la ha visto con la prueba.

RESPETO: Daniel esta con un grupo de alumnas y descubre que sus amigos le han puesto un chinche en el asiento a un compañero, que es considerado el "cerebrito" de la clase. El profesor no esta en el salón y todos están esperando que el "cerebrito" se siente para reírse de él. Daniel sabe que su compañero se podría hacer una dolorosa herida si se sienta en el chinche, pero sus amigos lo fastidiarán a él si le avisa.
  
 JUSTICIA Mónica y Patricia han comprado a medias un boleto de lotería cerca de la urbanización donde viven. Mónica ha guardado el boleto mientras Patricia estaba de viaje. El boleto resulta ganador de 100 bolívares fuertes. Mónica necesita 70 Bs. f. para pagar algunos útiles del colegio, y sabe que Patricia no necesita el dinero realmente y no se va a enterar de cuanto fue el premio, por lo que esta pensando darle a Patricia 30 bs. f., en vez de los 50 que le corresponde.
Actividad: A través de estos ejemplos identificar los valores y contestar que harían ellos en cada caso y porque.
Estrategia  4: Desarrollar el espíritu crítico y autocrítico de los valores, a través de tarjetas con patrones de conductas positivos y negativos.
Actividad: El docente entrega a cada estudiante una tarjeta previamente elaborada que incluye una cualidad positiva o negativa. Ejemplo: falso, sincero, educado, grosero, pesimista, optimista, honesto, interesado, ordenado, desordenado, etc. Se anima al debate crítico sobre las consecuencias que ocasionan las conductas negativas, qué hacer para cambiarlas, cómo fortalecer las conductas positivas, en fin generar una reflexión colectiva crítica y propositiva.
Estrategia  5: Producción libre y espontánea de historias, fabulas o cuentos con valores como: la sensibilidad, la paz, la igualdad y cualquier otro valor que se considere de importancia.
Estrategia  6: A través de ilustraciones, imágenes, fotografías, o cualquier material grafico, interpretar los valores que se quieren exaltar y porque son importantes para la convivencia.

Estrategia 7: El plan Maestro Actividad: Establecer tres bases de tiempo: anual, mensual y por día. En la base de tiempo anual escribirás lo que esperas lograr en un año. Los valores concretos que quieres alcanzar (incluye los que ya vives y los que quieres vivir). De esta lista, vas a dividirla en una base de tiempo mensual, concentrando un mes para cada actividad. En la base de tiempo por día establecerás una lista de "Lo que vivo y debo reforzar" y otra de "Lo que me falta".
En tu agenda, establece una meta concreta diaria pequeña, pero significativa de los valores que vas a reforzar y los que quieres vivir. Una meta concreta diaria puede ser "Hablarle por teléfono a Juan", para fortalecer el valor de la amistad tal vez tienes meses sin acordarte de alguna persona, o puedes establecer "Ayudar a alguien pobre" para fortalecer o crear la generosidad. Hazlo para el primer mes (es decir, el mes en el que estás.
Cada mes, debes revisar tu "Plan Maestro", establecer los valores con su actividad diaria y hacer una reflexión sobre los resultados.








PEDAGOGIA II TEMA: DESARROLLO DEL LENGUAJE

Universidad Alfonso Reyes.



Desarrollo infantil II

Nombre: Stephanie Martinez Silva.
Matricula: 3288
Fecha: 17/07/2013
Maestro(a): Lic. Karla Cruz Rodriguez


Desarrollo del lenguaje.
 ETAPAS DEL DESARROLLO DEL LENGUAJE:
Etapa pre-lingüística: Denominada también como la etapa pre verbal  comprende los primeros 10 a 12 meses de edad. Se caracteriza por la expresión buco-fonatoria que de por sí apenas tiene un valor comunicativo. Otros la consideran como la etapa del nivel fónico puro, debido a que el infante emite sólo sonidos onomatopéyicos.
Del nacimiento al mes y dos meses de edad: Desde que nace hasta más o menos, el final, del primer mes, la única expresión que se oye del bebé es el llanto, que es la primera manifestación sonora puramente mecánica o refleja y, como tal, indiferenciada en cuanto al tono, sea cual fuere la razón de su estado. Con el llanto, el bebé pone en funcionamiento el aparato fonador, permitiéndole también la necesaria oxigenación de la sangre y el establecimiento de la respiración normal.
De tres a cuatro meses de edad:  a esta edad ya distingue entre los sonidos: pa, ma, ba, ga. Sus vocalizaciones ya pueden mostrar alegría; sus manifestaciones de placer las expresa mediante consonantes guturales "ga.ga", "gu.gu", "ja.ja", mientras que su displacer mediante consonantes nasalizadas como "nga", "nga".
De cinco a seis meses de edad: el balbuceo o primer intento de comunicación que apareció alrededor de los tres meses de edad, se extiende hasta el octavo o noveno mes, progresando en el quinto y sexto mes hacia aquello que se denomina "imitación de sonidos". Esto comienza en forma de autoimitaciones de los sonidos que el mismo niño produce (reacción circular). Más tarde empieza a repetir sonidos que el adulto u otro niño produce.
De los siete a los ocho meses de edad: hasta los 6 ó 7 meses el niño se encuentra como "polarizado", vigilante y pendiente del adulto. Pero, el mismo niño que inició el contacto con el adulto mediante señales de llamada (gestos), cambia notablemente a partir de los 7 u 8 meses debido al desarrollo de sus habilidades motoras y posturales, "abandonando" un poco al adulto, iniciando su autoafirmación, basado en los logros que obtiene con su nueva capacidad exploratoria, tanto en su propio cuerpo como en los elementos próximos a su entorno.
De los nueve a los diez meses de edad en esta edad el niño manifiesta comportamientos claramente intencionados y, por tanto, inteligentes. La incorporación de los músculos accesorios del habla y de la masticación aumenta la destreza de la lengua y de los labios, favoreciendo la vocalización articulada. El niño muestra especial interés por imitar gestos y sonidos y por comunicarse, lo cual le induce a aprender rápidamente el lenguaje. Esto hace que se entregue a repeticiones espontáneas que suelen ser reforzadas por los padres, quienes también imitan y repiten varias veces con él.
De los once a doce meses de edad el niño de 11 meses cuenta en su repertorio lingüístico con más de cinco palabras. En esta edad el niño emplea idénticas palabras que el adulto, pero no les atribuye el mismo significado. Sin embargo, a medida que va progresando en este proceso, los significados que va atribuyendo a las palabras se van aproximando a los significados atribuidos por el adulto.
 Etapa lingüística: este período se inicia con la expresión de la primera palabra, a la que se le otorga una legítima importancia como el primer anuncio del lenguaje cargado de un propósito de comunicación.
Sin embargo, no se puede decir con precisión cuándo comienza, cuándo este anuncio del lenguaje se precisa y confirma, cuándo se puede hablar de la "primera palabra". Por eso la fecha de su aparición está diversamente fijada, ya que los estudios al respecto se basan mayormente en las informaciones que dan las madres.
Hay que señalar, además, que las niñas son las que empiezan a hablar un poco antes que los niños. Por otro lado, aparte del sexo, tomando como referencia las peculiaridades individuales, un niño puede demorarse más que otros en una etapa y pasar rápidamente por otra, condicionando la aparición de la primera palabra en los niños en cronologías distintas.
De los doce a los catorce meses de edad: Durante el primer año de vida el niño ha ido estableciendo toda una red de comunicación gestual, vocal y verbal con la familia. Entre los 13 y 14 meses, el niño inicia la conocida etapa "holofrástica" (palabra-frase), en la que emite frases de una sola palabra o elementos con varios significados. Por ejemplo, la palabra "abe" (abrir) lo utiliza para expresar diferentes acciones: Abre la puerta, Pela la naranja, Pon a un lado las cosas para.
De los quince a los dieciocho meses de edad: A los 15 ó 16 meses el niño se encuentra en plena etapa holofrástica (palabra-frase). Dentro de su repertorio léxico cuenta con 5 a 15 ó 20 palabras, y cada vez demostrará mayor incremento en su vocabulario por medio de las inflexiones de su voz al querer identificar algo.
De los dieciocho a veinticuatro meses de edad: entre los 18 y 24 meses, la mayoría de los niños cuentan con un vocabulario mayor a 50 palabras, pasando a combinar 2 a 3 palabras en una frase, dándose inicio al habla "sintáctica"; es decir, el niño comienza a articular palabras en frases y oraciones simples. En sus expresiones verbales utilizan sustantivos (nombres), verbos (acciones) y calificadores (adjetivos y adverbios).
 De los dos a los tres años de edad: el niño en sus expresiones verbales ya emplea verbos auxiliares "haber" y "ser" y da cierta prevalencia al artículo determinado. En el curso de esta edad comienza a utilizar las proposiciones y el niño ya tiene un lenguaje comprensible, incluso para personas ajenas a la familia.
 De cuatro a los cinco años de edad: a los cuatro años de edad el niño domina virtualmente la gramática, pero comienza a expresarse de acuerdo a un estilo "retórico propio", tal como Einsenson señala. El niño empieza a utilizar los pronombre en el siguiente orden: Yo, Tú, Él, Ella, Nosotros-as, Ustedes; contando con un vocabulario de 1,500 palabras y a los cinco años, 2,300 palabras aproximadamente.
De los seis a los siete años de edad: a esta edad se inicia la etapa escolar, en la cual el niño manifiesta una madurez neuropsicológica para el aprendizaje y un lenguaje cada vez más abstracto.
Debido al dominio del lenguaje el niño puede percibir distintas unidades lingüísticas dentro de una lectura o discurso, percibiéndolo como un todo.